Antes de todo y después de varias cosas, me gustaría hablar de una serie que he estado leyendo como un maníaco éstos últimos días y que inmediatamente terminó por atrapar mi ojo curioso después de estar al corriente con Shingeki no kyojin (El cual me tomó 3 semanas para ponerme al día, así de bueno está) y como tiene poco tiempo que no hablo de algún manga (TE-HEHEEE) el día de hoy le toca a "Chi no Wadachi", que por los buenos samaritanos que han hecho las traducciones al español sería "Un camino ensangrentado" (O como ya está escrito en la imagen, lel. Aunque les explicaré por qué personalmente me gusta la primer traducción) ay wey.
¿Por qué Room of angels? Bueno y ¿Por qué no? Todo empieza con la necesidad de escuchar los tracks tan míticos como relajantes de Akira Yamaoka que, urge haga un disco aunque no haya un Silent Hill a la mano. Y CURIOSAMENTE, que bueno que menciono a Silent Hill un poquito antes de lo necesario (o impertinente) porque, como éste manga y aquél videojuego comparten un subgénero; El Thriller.
Actualmente y en la cultura popular, relacionamos el terror con apariciones chocarreras, asesinos en serie (slasher) y monstruos nacidos de experimentos o deseos impuros, pero también ocurre que ya no se relaciona mucho el terror con ello, sintiéndonos abrumados porque la realidad nos supera cada vez mas y el terror lo encontramos a fuera de las calles, en la esquina o peor aún, dentro de uno y eso es el terror psicológico, fragmentos de diálogos o escenas que quedan en nuestras mentes incluso cuando estamos en nuestras noches mas solitarias, todo aquello que apela a los instintos y lo que la menta provoca a la persona convertirse en "Eso".
Definir terror como tal esta obra es un poco complicado y hasta osado, pero me refiero a ello al terror o mejor dicho horror (a pesar de que es precisamente, una historia de drama y suspenso) al hecho de que éste tipo de cosas se terminan por gestar en lugares menos pensados y después de estas vivencias es el tipo de gente que luego está por el mundo, o incluso teniendo hijos, ahí yace el horror de saber ésto.
Éste manga, ilustrado y escrito por Shuzo Oshimi (Aku no Hana) desde el 2017 para la revista Big Comic Superior de la editorial Shōgakukan ha comenzado a traer mas gente desde finales del año pasado y éstas últimas semanas ha ido aumentando cada vez mas, incluso para sus más recientes números (El cual para el día en que escribo ésto, me encuentro en el episodio 76 del manga, esperando que probablemente el viernes saquen dos capítulos) ha ido aumentando sus ventas pasando del millón y no es para menos por su historia que apela mucho a los deseos, morbo y el lamentable reflejo que a veces el lector tiene con las situaciones que se presenta dentro de la obra.
Ya teniendo un poco en la mente como por dónde va el asunto hablemos de su sinopsis;
La historia sigue los pasos de una familia, en especifico a la madre y su hijo quienes son Seiko y Seiichi Osabe respectivamente. Seiichi es un estudiante de primaria (probablemente en sus últimos años) un poco inseguro y para complementarlo muy bien Seiko es una madre sobreprotectora quién desde un infante a estado a su resguardo. Así pues Seiichi se encuentra en sus 13 años de edad y comienza a experimentar varias cosas sobre la pubertad y a la vez que la propia madre piensa que el hijo se va a lejando de ella, comienza a tomar actitudes mas psicóticas para mantenerlo a su lado, aunque a veces Seiichi de alguna extraña razón estar de acuerdo con dichas acciones de su madre.
Luego de leer las sinopsis a uno mismo se le viene a la mente >Bates Motel< una super serie la verdad, pero luego de que empieza a leer los primeros 7 capítulos los cuales uno mismo puede beberlos esperando el camión de tan relativamente cortos y lo simplificados que son, también se toma su tiempo para ir construyendo la relación peculiar de la madre y el hijo y como son éstos con los familiares, hasta llegar al punto de uno de los sucesos que comienzan a desatar toda la espiral de malas decisiones y locuras.
Ahora, no ahondaré en spoilers porque sería tomarme un tiempo para incluso hablar de forma minuciosa sobre los personajes, que no me atrevería a decir que son muy bien detallados, pero las dos estrellas principales sí y precisamente el "pasarse la bola" de culpabilidad uno mismo como buen lector comienza a sospechar de muchas maneras y conocer por qué se dan éstas cosas.
Y precisamente hablando del pasado, hacen mucho énfasis en una situación (que incluso es la portada del primer número, imagen anexada arriba) en donde la madre y el hijo toman un paseo, incluso en otros capitulos posteriores comienzan a complementar dicho recuerdo, en donde en primera estancia parece que la madre está un poco preocupada, luego procede vestir al hijo y le amarra los zapatos, después se ven ambos caminando en el callejon y al final de éste se encuentran a un gato "dormido", luego para percatar que en realidad está muerto luego de que Seiichi lo comience a tocar, se notan que las manos están llenas de sangre y después, la madre lo voltea a ver y se sonríe con él.
Ése mismo recuerdo es el origen de varias cosas, y lo que comienza hacer que Seiichi al inicio empiece a tenerle cierto resquemor a la madre, pero bueno, luego de un par de malas decisiones y enfrentamientos internos, a final de cuentas es un niño inseguro y conflictuado que yace en las manipulaciones de su madre para terminar siempre de su lado, pero ¿Quién es el malo? ¿Que es lo que permite el crecimiento de éstos pensamientos? La adición de un padre que nada mas le hace falta ser ausente para complementar el rango de una familia de lujo típica de éstos días complica mas los pensamientos de Seiko y agudizan sus acciones llegando a extremos que rozan entre la pena ajena, el disgusto y el espanto.
Un terreno que se puede comentar con pocos spoilers es el arte del autor.
Ya lleva consigo una historia adaptada al anime el cual le valió mucho reconocimiento al igual tratarse de una historia que explora bien los deseos internos, el crecimiento y cierto morbo.
Pero no solo se limita a expresarse con diálogos, lo hace completamente con los dibujos, tiene buena narración visual la historia, con esos trazos, sombras y expresiones, uno completamente reconoce que está sucediendo.
Aunque muchas veces puede parecer muy explicito, incluso eso ayuda para saber que pueda suceder mas adelante y como había mencionado con su Aku no hana, esas mismas expresiones, lineas y sugerencias apelan en ocasiones el morbo, bañando a la narrativa con ese plus de que sabemos estamos en un lugar en estado de descomposición.
Y con eso mismo del arte regresamos a la narrativa y su ritmo.
Todos, menos por el primer episodio son capítulos cortos de 23 páginas, que para casi para la mayoría de los mangas que son semanales (o hasta quincenales) muchas veces uno puede ver un solo capitulo en diez minutos tal vez, en lo que se aprecia el dibujo, el dialogo y muchas veces se es puesto bastante dialogo o gráficos que si toman mas tiempo para irlo analizando, aquí no, éstas cosas no ocurren, todo se va como un río, son casi pocos diálogos y cuando ocurren las transiciones todos son gestos y acciones y eso permite que uno mismo ir de manera fluida y disfrutar sin problemas un tomo completo (o yo que en dos días lei 76 capítulos y ya me enloquecí).
Hablando lo que es el dibujo y el dialogo.
Con rastro de sangre al inicio me referí no solo lo que representa aquel recuerdo compartido, o incluso el otro evento que desencadena todo, sino a los propios Seiichi y Seiko, el camino de sangre es el cordón umbilical, su relación sanguinea directa, pero no se detiene ahí, es bien sabido que la inteligencia se hereda de la madre y ... Adivinar que otras cosas también.Con ésto finalizo la recomendación y a futuro que parece estar relativamente cerca de sus arcos finales, ya deja uno camino para ir desentrañando éste drama pequeño.
Los Tkmucho
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